MÁS VIÑALES

Para pasar las últimas horas en Viñales había decidido invertir mi tiempo en dos actividades suficientemente estimulantes para mantenerme entretenida.

Por una parte tenía que ir por enésima vez a ETECSA a intenter establecer algún tipo de comunicación con el mundo exterior para poder saber exactamente mi próxima ubicación en la Habana y por otro lado, aconsejada por Adrián, había apalabrado una pequeña vuelta de 3 horas por el valle de Viñales a caballo.

La primera de mis tareas, se sufragó con un estrepitoso fracaso, después de más de 1 hora y tan solo dos personas delante, fui incapaz de comprar la robotarjeta para conectarme a algo que aquí le llaman internet. El hecho es que de las tres personas que trabajan en ETECSA, una realmente trabajaba y las otras dos, no se exactamente el porque, se dedicaban a mirar al que trabajaba.... esto provocaba que la cola aumentara, la gente llegaba, pedía la vez, se iba y posteriormente volvían todo estaba exactamente igual....

Al final sumida en un ataque de nervios por la incapacidad de poder solucionar nada en un futuro relativamente próximo he marchado hasta la casa de alquiler donde teóricamente me estaba esperando el guajiro que me iba a acompañar en mi vuelta a caballo.

Joan Manuel, me estaba esperando en la casa, vestido de cowboy con sus espuelas en las botas y su gorro de vaquero que ponía "Ronaldiño", vamos un personaje de lo más particular. Mi caballo era una hermosa especie alto y precioso que se llemaba Enrique Iglesias.

Después de los nervios iniciales por subir a tal béstia, nos encaminamos por los campos, hasta que en ese momento alguien llama a mi guía este decide marchar a galope y dejarme sola en medio del campo con Enrique..... gran momento para empezar el día.

Al cabo de un rato vuelve con dos caballos bastante pachuchos con dos tourist más, se trata de dos tipos rusos que también van a hacer la ruta con nosotros o al menos una parte de la ruta.

Caminamos tranquilamente por los campos, disfrutando del paisaje y del balanceo del caballo, mientras yo me convierto en una verdadera Elena Francis.... durante más de una hora, Joan Manuel no deja de explicarme que está enamorado de una chica de Pamplona, que eso es amor verdadero....vamos una delicia de paisaje.... como me hubiera gustado decirle al estilo Juan Carlos....Porque no te callas!

Al fin llegamos al secador de tabaco, entonces empiezan las explicaciones del guajiro sobre el cultivo y la elaboració del tabaco y más precisamente de los puros.... eso si, me toca hacer de traductora de los rusos.... ellos se han librado de las explicaciones amorosas de la primera parte de la ruta!

Luego aparecen también por allís dos catalanes más a caballo, esta vez no tengo que traducir, así que cuando acaban todas las explicaciones empiezan las compras.... que si agua de coco, que si puros.... bueno compras y degustación.

Finalmente marchamos de vuelta hacia Viñales, esta vez solos el cowboy y yo, así que me toca la segunda parte del consultorio de Elena Francis..... al final de la ruta, mis bambas y mis piernas son un barrizal impresionante.... vamos, que a estas alturas del viaje y yo con las bambas que hacen pena.... vamos ya tengo otra tarea para la Habana intentar sacar el barro y poder subir al avión de vuelta a casa más o menos decente.
De vuelta a Viñales toca la segunda parte de las comunicaciones con ETECSA, me dirijo a la oficina y aunque hay un cartel en la puerta bastante grande que ponde de 8.30 a 19.30, la oficina está cerrada.... pregunto a la gente del lugar y me comunican que posiblemente abran a la 13h.

Empaqueto mis cosas y las dejo preparadas, ya que voy con el tiempo justo, ya que la guagua sale a las 14h, el tiempo que me sobra vuelvo a pasarlo en ETECSA donde por fin me venden la robotarjeta...... pero cuando voy a intentar conectarme a internet me comunican que no hay electricidad.... y entonces para que quiero yo la tarjeta!!!!!!.

Con el tiempo justo, llega la luz, puedo leer el correo de Karen y poca cosa más, tengo que ir corriendo hasta Viazul o bien voy a perder la guagua que me lleva hasta la Habana.

La guagua inicia su viaje con un conjunto de Mejicanos, yo intento disimular mi presencia, pero cuando llegamos a las Terrazas es inevitable me calan y empiezan ha hablar conmigo.... cuando me ve Adrián se ríe..... estoy redeada de mejicanos y de los conductores de Viazul cantándome rancheritas y canciones de Camilo Sexto.....y si yo pensaba que esto acababa aquí me equivocaba han continuado en su ruta en guagua hasta la Habana, por risa de todos mis compañeros de viaje.

En la estación me despido de Adrián, le deseo buen viaje por su año sabático por sudamérica.... yo me dirijo hacia casa de Yvette y su madre donde me atienden de lo mejor.... es como estar otra vez en casa.