QUIÉN DUERME CON QUIÉN

Pues ayer hicimos eco de nuestra gran hospitalidad en casa, y es que celebramos una de nuestras fiestas, para la presentación oficial del nuevo compañero de piso y la despedida oficiosa de mi antigua compañera de piso.

El hecho es que la cena, compuesta básicamente de un cátering patrocinado por el padre de Ricard, y el bebercio patrocinado por Mar y Ricard, lograron congregar la friolera de 20 personas en nuestro hogar.

La fiesta fue bastante bien, alguna que otra persona con dosis de alcohol superiores a las establecidas, pero sin nada más que un punto de gràcia a la velada.

El hecho es que una vez finalizada la fiesta, más de uno y de una se quedó a dormir, y aquí empezó el problema por que si se tiene en cuenta que disponíamos de dos camas de matrimonio y de una individual, estas son las siguientes limitaciones:

a/ dos chicos, no se porque, no pueden dormir juntos.
b/ Mar no puede dormir en su sofa.
c/ Si Ricard pillaba cacho, necesitaba la cama de matrimonio
d/ Si Ricard no pillaba cacho, no sabíamos donde meter a la chica.
e/ Yo no estaba dipuesta a dejar que mi amiga durmiera con alguna desconocida/o.

Finalemente las reparticiones fueron las siguientes:

a/ Álex durmió solo en su cama de matrimonio
b/ Gema, la amiga de Ricard, durmió sola en mi cama.
c/ Mar y Mila durmieron en la cama de matrimonio de Ricard.
d/ Yo dormí en el colchon balancín dispuesto en el suelo de la habitación de Ricard.
e/ Ricard compartió comedor, que no sofa, con Gisela.

Conclusión, que teniendo en cuenta que nos pasamos casí más de una hora intentando hacer una distribución de camas que gustara a la gente y ayer nos quitaron una hora de sueño, aquel que durmió fue afortunado